El Acuerdo de París es la espina dorsal de la acción internacional para hacer frente al mayor desafío de nuestra civilización: el cambio climático.
Donaldo Trump retiró los EE.UU. del acuerdo, poniéndose del lado de los millonarios y multimillonarios de los combustibles fósiles que quieren destruir nuestro planeta y nuestros hogares.
París no es perfecto, pero es un paso adelante. Sigue a nuestro lado para mostrar a otros líderes mundiales, directores ejecutivos, gobiernos locales y a todo el que esté mirando, que el impulso político que nos separa de los combustibles fósiles y nos acerca a una economía basada en un 100% de energía limpia y renovable que nos sirva a todos, es imparable.