En tiempo record y sin consulta previa, se está por aprobar la construcción del oleoducto Vaca Muerta Sur. Esta obra conectará la zona productiva de Vaca Muerta con un puerto petrolero en Punta Colorada; poniendo en peligro a muchas especies, incluida la ballena Franca Austral.

Para muchos el oleoducto es una de las soluciones a la crisis económica Argentina, ya que impulsará la producción de Vaca Muerta, exportando al resto del mundo el petróleo extraído a través de fracking. Sin embargo, poco se habla de los incalculables impactos negativos que generaría este proyecto sobre el ecosistema del golfo. 

Ésta es un área con una biodiversidad vital para la reproducción de las especies del Atlántico Sur, a pocos kilómetros de uno de los emblemas turísticos de Argentina: la Península de Valdez. Se trata de un área a donde la ballena franca austral hace base durante su recorrido migratorio (por todo el Océano Atlántico Sur). Incluso, cada vez es más común que en las aguas del Golfo San Matías las ballenas tengan cría. Esto confirma que es importantísimo proteger la región. 

“El Golfo San Matías es nuestro hogar, donde nos criamos, donde trabajamos. Vivimos frente al mar, estrechamente vinculados con sus playas y al mar. Desde 1999 contamos con la protección de la Ley 3.308, que nos garantizó un desarrollo sostenible tanto del turismo como de la pesca. Pero por sobre todas las cosas, nos garantizó el buen vivir. Por eso este proyecto nos pone bajo amenaza, no solamente a los miles de puestos de trabajo, sino también a nuestra forma de vida”, comparte Fabricio Di Giacomo, miembro de la Multisectorial Golfo San Matías, organización vecinal que surgió para frenar el feroz avance del oleoducto y puerto petrolero. .

Únete a la Multisectorial Golfo San Matías y las miles personas que no deseamos más destrucción en nombre del desarrollo fósil, y protejamos al mar patagónico de la destrucción. Suma tu firma para pedir  que se frene el avance del oleoducto y puerto petrolero.